Las tensiones comerciales podrían ser un obstáculo para los bienes oceánicos, lo que subirían el precio de los alimentos de origen marino en Estados Unidos, según un informe de Naciones Unidas.
Estados Unidos impuso aranceles del 10 por ciento a los productos del mar, mientras que China debe pagar 30 por ciento de arancel, según la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo.
Las poblaciones de peces son limitadas en Estados Unidos por la sobrepesca y se necesita tiempo para elevar la producción estadounidense, según Naciones Unidas.
Estados Unidos importó 16.000 millones de dólares en pescado en 2024, según datos de Naciones Unidas. Probablemente Brasil, reoriente sus productos marinos hacia mercados alternativos.
Algunos transportistas marítimos podrían sufrir una menor demanda por los cambios en las rutas comerciales, debido que el comercio mundial busca mercados diferentes para exportar mercancías.
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