La economía alemana probablemente se contraerá 0,3 por ciento en 2023, debido que la pérdida de poder adquisitivo que impulsa la inflación y endurecimiento de las condiciones financieras pesa sobre el consumo e inversión, según la Comisión Europea.
El gobierno de Alemania espera que la economía tenga una contracción de 0,4 por ciento durante 2023. La economía más grande de la Unión Europea pelea con las tasas de interés más altas en 10 años. La reducción de la producción industrial y contracción del sector construcción está pasando factura sobre Alemania.
A partir de 2024, se espera que la demanda interna tenga una mejora, impulsada por el crecimiento de los salarios. Junto con la recuperación de la demanda externa, probablemente esto respalde un repunte del crecimiento del PIB al 0,8 por ciento en 2024 y 1,2 por ciento durante 2025, según la comisión europea.
El pronóstico es notablemente inferior al que proyecta el gobierno alemán, que espera que la economía se recupere entre 2024 y 2025, creciendo 1,3 y 1,5 por ciento, respectivamente.
Mientras que la inflación seguirá disminuyendo, aunque a un menor ritmo, para alcanzar 3,1 por ciento en 2024 y 2,2 por ciento en 2025. Las finanza pública alemana están comenzando a mejorar con déficits y relaciones deuda-PIB gradualmente destacó la comisión europea.
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