La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional anunció la suspensión de las contrataciones de trabajadores considerados no esenciales en oficinas nacionales como en el extranjero.
Todo el personal contratado directamente por Usaid será puesto en descanso administrativo en todo el mundo, con la excepción del personal con funciones críticas para la misión, liderazgo y programas especialmente.
Esta decisión sucede tras los crecientes rumores de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cerrará esta agencia, fundada en 1963, con cerca de 10.000 empleados.
Tras la llegada al poder de Trump, el Gobierno congeló las ayudas al exterior, excepto la que va destinada a Israel, Egipto y suministro de alimentos de emergencia. Según la ONU, Estados Unidos es el mayor proveedor de ayuda humanitaria en el mundo.
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