Los ciudadanos estadounidenses esperaban que en enero las presiones inflacionarias siguieran elevadas en el corto plazo y que sean modestas en el largo plazo, mientras que recortaron sus expectativas sobre un crecimiento en sus ingresos, informó la Reserva Federal de Nueva York.
El reporte del ente monetario regional señala que los estadounidenses esperan que la inflación de aquí a un año siga entorno al 5 por ciento. El nivel de la inflación en los próximos tres años estaría en 2,7 por ciento para los encuestados.
Los políticos de la Reserva Federal están muy atentos a estos datos porque creen que influyen en la inflación. La trayectoria prevista para la inflación en el futuro sigue por encima del objetivo del 2 por ciento, mientras el banco central presiona con alzas de tasas para combatir los altos precios.
El ente regional mencionó que el aumento en los precios de la vivienda alcanzó su segunda lectura más baja desde 2020. La encuesta halló que en enero los estadounidenses veían el futuro crecimiento en los ingresos de los hogares.
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