Lula da Silva quiere realizar cumbre climática en plena Amazonía

Lula da Silva, presidente de Brasil, quiere mostrar la realidad de la Amazonía cuando en 2025 se realice la cumbre de las Naciones Unidas sobre el clima. Aunque, para los asistentes, podría significar viajes complicados y condiciones precarias.

El estado de Pará, que alberga una cuarta parte de la Amazonía, deberá triplicar su capacidad hotelera y superar cuellos de botella en transporte y saneamiento antes de poder albergar a los delegados de la COP30 a fines de 2025.

Mientras que Belém, capital del estado, cuenta con 12.000 camas de hotel. Por lo que, necesitará al menos 41.000 para el momento más álgido de la cumbre, que es cuando asistan los jefes de Estado.

Otro reto estará en el alcantarillado en Belém. La ciudad, de 1,3 millones de habitantes, recoge 20 por ciento de aguas residuales y menos del 3 por ciento son tratadas.

Lula propuso Belém como sede de la COP30 a finales de 2022, impulsando la protección de la selva tropical en su tercer mandato, con el que espera restaurar el liderazgo de Brasil en temas climáticos.

Aunque los problemas de logísticos, el gobierno trabaja para mejorar los sistemas de drenaje y alcantarillado, pavimentando 600 carreteras y ampliando otras infraestructuras, como aeropuerto de Belém. Sin embargo, actualmente solo funciona en un 50 por ciento de su capacidad.

Te puede interesar

+ No hay comentarios

Agregar comentario