Meta realiza pruebas a su primer chip de entrenamiento de inteligencia artificial interno, marcando un paso en su esfuerzo por reducir la dependencia de proveedores como Nvidia.
El despliegue a pequeña escala comenzó, Meta espera aumentar la producción para un uso más amplio. El plan forma parte de una estrategia más amplia para reducir costos, debido que la empresa pronostica gastos para 2025 de hasta 119.000 millones de dólares, con 65.000 millones de dólares para la infraestructura de inteligencia artificial.
El nuevo chip es un acelerador dedicado y optimizado para tareas específicas de inteligencia artificial en lugar de computación general, lo que podría hacerlo más eficiente que las GPU tradicionales.
El chip es el último de la serie Meta Training, un programa que enfrenta desafíos en el pasado. Aunque, Meta lanzó con éxito un chip de inferencia MTIA, que esperan aplicar a sus propios chips en los modelos de entrenamiento para 2026.
Meta sigue siendo un cliente importante para Nvidia, el cambio a chips internos refleja temores más amplias sobre la sostenibilidad de los modelos de inteligencia artificial a gran escala.
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