El peso mexicano probablemente registrará un año sobresaliente en 2023, mientras diferentes inversionistas elegirían las cualidades de refugio seguro sobre esta moneda, como motivo para ser optimista.
JPMorgan y Bank of America promocionan al peso mexicano como la apuesta de divisas más atractiva en América Latina, impulsada por las posiciones políticas y fiscales estables que vive en la actualidad México, sus tasas de interés aún altas y proximidad a Estados Unidos. Para algunos estrategas, la caída del peso mexicano de este mes seria una buena oportunidad.
El peso mexicano es una de las divisas con mejor desempeño durante 2022, está entre las monedas principales y registra ganancias de 4 por ciento este año, incluso tras un reciente período de debilidad.
Igualmente muestra buen desempeño en términos de carry trade, este año registro un retorno por encima del 10 por ciento a los inversionistas que se endeudaron con instrumentos en dólares con una tasa baja para comprar deuda en pesos con una tasa más elevada.
México cuenta con déficit fiscal y de cuenta corriente del 3,2 y 1,1 por ciento del PIB, respectivamente, cifra inferior a los de pares con la misma calificación crediticia.
Los especuladores utilizan la caída de fin de año para elevar sus apuestas al alza del peso al nivel más alto desde 2017. México seguirá mostrando su lado positivo en términos de carry trade, cuentas externas y riesgos políticos, según JPMorgan.
Las elevadas tasas de México, que actualmente se ubican en 10,5 por ciento, brindan cierto apoyo, incluso cuando el mercado espera que el banco central adopte una postura expansiva en 2023.
Existe un grupo en el mercado cambiario que ve una oportunidad para el peso mexicano si las empresas trasladan operaciones a México desde países asiáticos. Bank of America recomienda apostar por el peso mexicano y no arriesgar con el yuan chino para registrar ganancias.
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