Vladimir Putin anunció que Rusia analiza la posibilidad de retirarse del acuerdo sobre el Mar Negro, que ayuda al paso de granos por esa vía, afirmando que el país fue engañado, debido que el pacto afecta a sus propias exportaciones.
El mandatario ruso detalló que el acuerdo, negociado por las Naciones Unidas y Turquía, estaba destinado a ayudar a países de África y América Latina, pero que Europa es el mayor importador de grano procedentes de Ucrania, proporcionando una fuente de divisas importante para Kiev.
De forma sorprendente, Putin también señaló que en Rusia escasea municiones de alta precisión, equipos de comunicaciones y aviones no tripulados. Agregando que el país podría haber estado mejor preparado para realizar ataques con drones en Ucrania.
Además, advirtió a Kiev que no podrá resistir por mucho tiempo con el armamento suministrado por sus aliados, cuando la industria militar no produce y está a punto de desaparecer.
Putin detalló que Kiev también perdió hasta el momento más de 160 tanques y 360 vehículos blindados de varios tipos, mientras que el volumen de pérdidas de equipos suministrados por aliados se estimaba entre 25 y 30 por ciento.
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