China ahora será un cobrador de deudas a países en vía de desarrollo

Los países más pobres del mundo enfrentan un desafío monumental en 2025, debido que deberán reembolsar a China una cifra récord por préstamos recibidos por años. Así lo revela un informe que enciende las alarmas sobre el impacto de esta deuda en las economías más vulnerables.

Xi Jinping, presidente de China, lanzó en 2013, la Iniciativa del Cinturón y la Ruta, programa que fue un motor en préstamos destinados a construir infraestructuras que conectarán Asia, Europa y África. Para fomentar el comercio global y, por supuesto, expandir la influencia de Pekín a nivel mundial.

Del total de 35,000 millones de dólares en reembolsos deberán pagar a China en 2025, una cifra preocupante, pero 22,000 millones de dólares corresponderán a 75 de los países más pobres y vulnerables del mundo, un escenario que genera mayor preocupación.

En 54 países en vía de desarrollo, los pagos superarán los pagos combinados que deben al Club de París, un grupo informal de prestamistas occidentales. Mientras el mundo se centra en la economía, la creciente carga de deuda con China, plantea interrogantes sobre la sostenibilidad fiscal, estabilidad social y futuro del desarrollo en estas regiones.

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