Incertidumbre en el sector tecnológico estadounidense ante la IA de bajo costo y tensiones comerciales globales: Implicaciones para la inversión. El creciente avance de la inteligencia artificial en las empresas estadounidenses se ve empañado por los temores de una rentabilidad lenta y las dudas generadas por los modelos de IA desarrollados a bajo costo por la firma china DeepSeek.
Este panorama introduce un elemento de cautela en las valoraciones del sector, especialmente si la competencia de modelos más económicos presiona los márgenes de beneficio de las empresas líderes.
Adicionalmente, una potencial guerra comercial global, iniciada durante la administración Trump, se erige como una amenaza significativa para frenar el auge en sectores clave como la tecnología y el software.
Los inversores deben monitorear de cerca la evolución de las políticas comerciales, ya que aranceles y restricciones podrían impactar negativamente las cadenas de suministro, los costos de producción y, en última instancia, la rentabilidad de las empresas tecnológicas con exposición internacional.
La próxima ronda de informes de ganancias de gigantes tecnológicos como Google y Microsoft, así como de empresas de servicios públicos como Vistra y Constellation Energy, será crucial para discernir el impacto real de los aranceles entre Estados Unidos y China.
Estos resultados ofrecerán una visión sobre cómo las empresas están adaptando sus ambiciosos planes de infraestructura en respuesta a este entorno económico complejo.
Observamos que los clientes de estas grandes tecnológicas están mostrando una creciente cautela y reduciendo su gasto ante la incertidumbre. Algunos analistas sugieren que esta prudencia podría afectar las inversiones en herramientas de IA.
Además, señalan indicios tempranos de una moderación en los arrendamientos de centros de datos. Esta tendencia podría presionar el crecimiento de los ingresos de las empresas proveedoras de infraestructura digital.
En un movimiento preventivo, tanto Google como Microsoft han reafirmado sus planes de gasto de capital, que en conjunto suman la considerable suma de 155 mil millones de dólares.
Esta cifra representa cerca de la mitad de los 320 mil millones de dólares que los analistas estiman que las grandes tecnológicas invertirán en IA en 2025. Si bien esta inversión subraya la apuesta a largo plazo por la IA.
Las proyecciones de los analistas apuntan a un aumento drástico del 145% en los aranceles estadounidenses sobre los productos chinos, lo que incrementaría sustancialmente los costos operativos de los centros de datos si no se revoca una exención para los productos electrónicos.
Este aumento de costos podría erosionar los márgenes de beneficio y requerir ajustes en las estrategias de precios. Finalmente, el pronóstico de JP Morgan estima que el gasto en centros de datos podría contribuir entre 10 y 20 puntos básicos al crecimiento económico del país en 2025-2026.
Sin embargo, esta proyección debe considerarse en el contexto de las crecientes tensiones comerciales y los posibles aumentos arancelarios, que podrían moderar este impacto positivo.
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