Mercado petrolero mundial tendrá enorme exceso de oferta en 2026

Según su última previsión, el mercado petrolero se enfrentará a un superávit aún mayor en 2026, que podría alcanzar hasta 4 millones de barriles diarios. Este escenario surge en un contexto en el que los productores de la OPEP+ y sus rivales siguen ampliando la oferta, mientras la demanda permanece deprimida.

La AIE, que funciona como asesor técnico de los países industrializados, ha revisado al alza su estimación de exceso de oferta para 2026. En su informe más reciente, la agencia eleva el superávit previsto desde 3,3 millones de bpd en el último mes hasta 4 millones de bpd.

Si se materializa, ese volumen representaría cerca del 4% de la demanda mundial de petróleo, una brecha que podría presionar los precios a la baja y generar tensiones en las cadenas de suministro energéticas.

El nuevo pronóstico destaca varios factores que influyen en la dinámica de oferta y demanda. Por un lado, la Organización de Países Exportadores de Petróleo ha mantenido una postura de incremento gradual de la producción, buscando equilibrar ingresos frente a la volatilidad de precios y a la incertidumbre macroeconómica global.

Por otro, rivales como Estados Unidos, Brasil y otros grandes productores han mostrado resiliencia para sostener o incluso aumentar sus volúmenes, aprovechando precios relativamente altos en ciertos tramos del ciclo y avances en la extracción de esquistos.

La demanda petrolera mundial continúa siendo un barómetro sensible a factores como el crecimiento económico, la recuperación postpandemia y las políticas de eficiencia energética.

Si la demanda no acompaña la curva de oferta, el mercado podría enfrentar compensaciones de precios, costos logísticos y posibles impactos en inversiones de largo plazo en la transición energética.

Este superávit podría influir en la disciplina fiscal de países dependientes de ingresos petroleros y en las proyecciones de gasto público, especialmente en economías emergentes que dependen fuertemente de la volatilidad de las cotizaciones.

La economía global observará con atención si este desequilibrio se materializa y cómo repercutirá en precios, inversión y geopolítica energética durante el año límite de la transición hacia fuentes más limpias.

Te puede interesar

+ No hay comentarios

Agregar comentario