Alemania solicitó a la Comisión Europea una exención temporal sobre los límites de endeudamiento establecidos por la Unión Europea. El objetivo, pasa por aumentar significativamente el gasto en defensa durante los próximos años, en un contexto geopolítico marcado por tensiones en Europa del Este.
La propuesta europea busca facilitar el incremento sobre el gasto militar, que plantea elevar la inversión en defensa de los Estados miembros en un 1,5% del PIB cada año durante los próximos cuatro años.
El organismo europeo confiaba en una amplia acogida de esta iniciativa, anticipando que podría catalizar una inversión total en defensa de 650.000 millones de euros en el próximo cuatrienio.
Aunque, la respuesta a la propuesta ha sido tibia. Hasta el momento, solo Portugal y Polonia manifestaron su interés en acogerse a esta exención. Los países de la Unión Europea que enfrentan niveles elevados de deuda se muestran escépticos al incurrir en más préstamos para financiar el gasto en defensa.
La propuesta alemana podría animar a otras naciones a seguir un camino similar. Aunque, la reticencia de los países más endeudados plantea interrogantes sobre el consenso para implementar esta flexibilización sobre las normas fiscales.
La decisión final y postura que adopte la región en las próximas semanas serán crucial para definir la estrategia sobre la defensa europea y el futuro de las reglas fiscales en un entorno internacional complejo.
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