La inflación en la Unión Europea seguirá retrocediendo en los próximos años y podría situarse por debajo del 2 por ciento fijado como meta por el Banco Central Europeo para 2026, según un estudio reciente del ente monetario.
El Banco Central Europeo tiene años sin poder alcanzar el objetivo, en 2023 elevó las tasas de interés a máximos históricos para contener los precios, pero podría tardar hasta finales de 2025 en alcanzar la meta.
La encuesta realizada por el Banco Central Europeo a expertos, contribuye a las deliberaciones sobre política monetaria, en la consulta se prevé que la inflación se ralentizará más rápido de lo previsto y que el crecimiento de los precios se estabilizará cerca del objetivo del órgano monetario.
La inflación en 2024 podría situarse en promedio en 2,4 por ciento, en consonancia con la perspectiva de la encuesta, y podría retroceder al 2,0 por ciento en 2025, ambas cifras estarían por debajo de las proyecciones internas del Banco Central Europeo.
En 2026, la inflación podría ubicarse en 1,9 por ciento, pero en 2028 se situaría en la meta del 2 por ciento. El Banco Central Europeo igualmente mantuvo sin cambios las tasas de interés, pero dejó abierta la puerta a una relajación, en parte porque el crecimiento parece débil, apuntando a una relajación de las presiones sobre los precios de la producción.
+ No hay comentarios
Agregar comentario